miércoles, 9 de junio de 2010

Regresión a la media

Artículo sugerido por PAR

Por Adrián Paenza

En una época (allá lejos, en la década del ’60 y parte de la del ’70), la revista El Gráfico era importante. Es decir, todos los que fuimos niños/adolescentes en ese momento esperábamos su aparición como si fuera la Biblia en fascículos coleccionables. Religiosamente, todos los lunes por la noche, cerca de las 7 y media, aparecía el camión que repartía (entre cosas) nada menos que El Gráfico. Ese ritual ya no existe pero la referencia que quiero hacer es que, en aquella época, se decía que los que salían en “la tapa” de la revista, quedaban “enyetados”. Era como someterse a una suerte de maleficio. El orgullo que le representaba al atleta aparecer en la portada se desvanecería abruptamente y lo más probable es que se produjera una fuerte y sensible “baja” en su producción.

Todo esto, naturalmente, formaba parte de una fértil imaginación. Y sobre todo, de la avidez por creer en semejantes estupideces. Pero con el tiempo descubrí que hay otros países en donde sucedía (y sucede) un fenómeno similar. El equivalente de nuestro antiguo Gráfico en el Estados Unidos actual es la revista Sports Illustrated (“Deporte Ilustrado”). Un par de semanas atrás leí en varios lugares que lo mismo que se decía en la Argentina también se decía allá. Más aún, hay una página en Internet [1], que recolecta datos para reafirmar el argumento.

Ahora bien: ¿por qué habría que hacer una comparación entre estas revistas? ¿Por qué podría producirse en la Argentina y en Estados Unidos un fenómeno similar? ¿Se puede –acaso– encontrar una explicación? Más aún: ¿tiene la matemática “algo” para decir?

En el año 1886 el científico inglés Sir Francis Galton publicó un artículo “fundacional”: “Regression towards mediocrity in hereditary stature” (algo así como “Regresión a la Media en la Estatura Heredada”). Más allá del título pomposo, lo que el científico inglés hizo fue poner a prueba una hipótesis: el hecho de que una pareja de padres fueran más altos que la estatura media, no era una condición que inexorablemente heredarían sus hijos. Y lo mismo del otro lado: hijos de padres de alturas por debajo de las normales tenderían a ser más altos que sus progenitores.

Tomando una muestra de 205 parejas de padres y sus 928 hijos, Galton comprobó que cuando la altura promedio de los padres era mayor que la de la población media, los hijos tendían a ser más bajos que sus padres. Y de la misma forma, cuando la altura promedio de los padres era menor que los de la media de la población, los hijos tendían a ser más altos.

Más aún: con el paso del tiempo, y de sucesivas generaciones, todo tiende a normalizarse. Esto se conoce con el nombre de “Regresión a la Media”.

Lo que lleva históricamente a atletas de todos los países a aparecer en la tapa de las revistas más famosas son producciones que superan la media, no sólo la media general sino la de ellos mismos. Solamente un grupo muy, muy reducido puede mantener ese nivel. Lo más probable es que vuelva a la “normalidad”, o sea, que se produzca una “regresión a la media”. En lugar de entenderlo así, es más fácil decir que salir en la tapa “trae mala suerte”. Quizá sea así, no lo sé.

Pero lo que sí sé, es que no tener la información suficiente ni estar preparado para interpretar la realidad, ya no es adjudicable al azar sino a la falta de educación. Y de eso, somos responsables todos